¿Se puede educar hoy día para el Amor?

A esa pregunta que a veces me hago, pienso que sí. El sábado 30 de enero de 2016 hemos tenido una experiencia que nos confirma esa idea. Ha sido en Atarfe, en los salones parroquiales junto a la Ermita de Santa Ana.

30 adolescentes de las parroquias del Señor de la Humildad de Chauchina y de La Encarnación de Atarfe acompañados de sus catequistas hemos participado en uno de los Talleres TEA. Taller de Educación para el Amor. El taller ha sido impartido por un equipo de nuestra diócesis coordinado por D. Antonio Luis Martín, Párroco de Durcal y Niguelas.

Al final del día, todos, los pequeños y los grandes teníamos una gran sonrisa. Lo hemos pasado bien y hemos aprendido muchas cosas. Hemos tenido ratos de reflexión, de juego, de silencio,  de risas, de oración, en fin, un gustazo.

Y es que es importante contar con una “buena receta”. Si mezclamos un buena fundamentación en la rica reflexión de la Iglesia sobre el amor y la sexualidad, un buen puñado de creatividad y un gran chorro de fe y de experiencia del Amor de Dios, pueden salir platos muy interesantes como por ejemplo este taller “TEA”.

En algunos momentos todos juntos y en otros divididos en grupos hemos ido tratando diferentes dimensiones. En la primera parte del día estuvimos viendo aspectos como: la toma de conciencia del valor de nuestro cuerpo y el de los demás, expresión corporal, autoconocimiento, higiene y salud, como expresarnos a través de la poesía y la música y la imagen personal.

En el rato de la comida disfrutamos en la plaza que hay junto a la Ermita de un rato agradable y un estupendo solecito.

En la segunda parte del día, comenzamos con unos juegos educativos, a continuación tuvimos la ocasión de escuchar distintos testimonios de como se concreta la llamada al Amor que hace Dios a todo ser humano. La de un matrimonio, la de un sacerdote y la de una seglar con su experiencia en una misión en África. Y como colofón de la jornada, una oración en forma de danza y la escucha de la Palabra de Dios.

El taller me parece de una gran riqueza. Es dinámico y consigue integrar las dimensiones fundamentales del proceso vital de los adolescentes, que a veces en la familia o en la escuela se plantean como aisladas o sesgadas. La dimensión física, la psicológica, la relacional y la espiritual. Como catequista me parece que el Proyecto TEA se complementa estupendamente con el planteamiento de Camino de Fe y de seguimiento de Jesús con los adolescentes y jóvenes de nuestra parroquia.

En nombre de todos los que hemos participado, gracias a todo el Equipo TEA por vuestra labor.

Mª Gracia Rodríguez Gállego.

Parroquia de Atarfe.